Playa Tamarit, ¿playa de calidad? La bandera ondea en su mástil, luciendo en todo su esplendor. Más que una bandera, parece un trozo de tela sucia y raída por el viento (lo blanco de la bandera, está grisáceo). Cuando a una playa se le concede la bandera azul, tiene que merecerlo y la playa de Tamarit no se merece dicha bandera. ¿Por qué? Nueve meses sin servicios (váteres, etc.), socorristas, que hasta en Semana Santa, cuando ha habido gran afluencia de personas, han brillado por su ausencia los chicos de rojo. Los Lavapiés desprenden un olor nauseabundo de agua corrompida.
Hablando de seguridad en esa playa, las personas pasean por la orilla, y los de kite surf pasan a velocidad de vértigo, con las cuerdas cercanas a los paseantes, asustándolos. Si se les recrimina para que se alejen de la orilla, te contestan, “tranquilo, está controlado”. Al día siguiente, la vida sigue igual, lo mismo de lo mismo.