Un pequeño susto se llevaron los fieles que participaban en la procesión de la Virgen del Carmen en Tabarca. Cuando estaban en el puerto la imagen, que al parecer no estaba bien sujeta, se volcó. Por suerte, las personas que había alrededor del trono la sujetaron a tiempo y no cayó al suelo, con lo que no sufrió daños de consideración y solo un pequeño rasguño. La corona también provocó una pequeña herida a un hombre.
Como es tradición, cada año la imagen de la Virgen del Carmen se coloca en un barco distinto cada 16 de julio para dar una vuelta completa a la isla en una procesión que primero transcurre por tierra y culmina en el mar.