El Ayuntamiento en Pleno aprobaba la pasada semana, con doce votos a favor y ocho abstenciones, el inicio del expediente para la retirada como agente urbanizador del Sector Balsares a Bankia Habitat SL. Esto abre las puertas a que los vecinos puedan urbanizar el sector. La edil de Urbanismo, Lola Gadea, indicaba a este medio que “de momento, ni tan siquiera se ha pasado la comunicación de la resolución del Pleno tanto a los vecinos como al agente urbanizador, en este caso Bankia Habitat”.
Toda vez que tengan la comunicación oficial, Bankia Habitat podrá ejercer las oportunas acciones preceptivas puesto que, según aclaraba Gadea, “no ha sido el Ayuntamiento quien ha pagado tres millones de euros, como se indicaba en algunos medios. Muy al contrario, el Ayuntamiento recibió un pago de cuatro millones, que el agente urbanizador depositó en concepto de adelanto de las plusvalías”.

Formas de urbanización

Obligado es explicar, grosso modo, que existen tres formas de gestión a la hora de la urbanización de un sector. La primera de ellas, la urbanización por gestión directa del Ayuntamiento, donde es éste quien, toda vez que se aprueba de forma reglamentaria un proyecto (con exposición, audiencia a los vecinos, plazos de interposición de alegaciones, etcétera) gira de forma paulatina a los afectados las cargas del coste de urbanización y, en el momento que tiene el dinero necesario, licitar las obras. Aquí se reservaría el derecho oportuno de vigilancia.
En la segunda forma, es el Ayuntamiento quien, toda vez que tenga el proyecto de urbanización, lo licita. Varias empresas presentarían sus ofertas y, la que salga vencedora en concurso, es la que se encargaría de cobrar a los vecinos los cargos de urbanización y realizar la reparcelación oportuna. Ésta es la situación en la que se encontraba Bankia Habitat.
La tercera, y más nueva, forma de urbanizar un sector viene recogida en la Ley de Ordenación Urbanística y del Territorio. Aquí se favorece y premia claramente a los vecinos e interesados porque, en primer lugar, es más eficiente y, en segundo, porque se reconoce el derecho a urbanizar el terreno al propietario, quienes son, finalmente, los que habrán de pagar las oportunas plusvalías por la reurbanización de sus terrenos. En este caso, los vecinos son quienes tienen la obligación de contratar el proyecto y la ejecución de la reparcelación de los terrenos a través de una tercera empresa, encargada de realizar las obras. O bien por medios propios, constituyéndose como tal y cumpliendo la normativa. El proyecto de urbanización lo pone el Ayuntamiento (con lo que se ahorran estos gastos) y pueden llegar al acuerdo oportuno con la empresa que ejecutaría las obras (bien pago en efectivo, bien cesión de suelo a cambio de terreno urbanizado, pisos, etcétera). Claramente, una medida ventajosa.

¿Qué va a pasar?

Ante las noticias aparecidas en los medios de comunicación, Lola Gadea aseguraba que “toda vez que se realizan las oportunas comunicaciones del acuerdo, cuando comenzaremos a hablar con los vecinos siendo ellos los que tendrán que ponderar cuál será su decisión”. Por otra parte, recordaba, con este acuerdo plenario se abre la puerta a que Bankia Habitat presente, o no, las oportunas reclamaciones.