La formación recuerda que la Ley de Movilidad obliga a todos los municipios de más de 20.000 habitantes a aprobar un plan de estas características
Compromís ha presentado una moción en el Pleno del Ayuntamiento de Santa Pola pidiendo la elaboración de un Plan de Movilidad Urbana Sostenible (PMUS). Esta planificación, con la que Santa Pola está obligada a contar según la Ley de Movilidad de la Comunitat Valenciana, es un instrumento para impulsar los cambios necesarios en la movilidad urbana con criterios de sostenibilidad, situando en el centro de la planificación a las personas.
La gran mayoría de municipios del entorno de Santa Pola, como Alicante, Elx, Crevillent, Guardamar, Aspe, Almoradí, Dolores o Novelda, cuentan ya con un PMUS en vigor o en proceso de tramitación. Para Compromís resulta "urgentísimo" iniciar la elaboración del PMUS santapolero y "dejar de ser el único punto negro de la zona".
La formación destaca que “Santa Pola ha cambiado mucho en las últimas décadas, pero no ha habido avances significativos en materia de movilidad”: “La presión inmobiliaria ha hecho que exista un déficit de zonas verdes y espacios públicos para las vecinas y vecinos del municipio, si a esto le sumamos el uso intensivo de los vehículos privados en nuestras calles, podemos comprobar cómo cada vez se está arrinconando más a peatones y ciclistas”.
Compromís reclama al Ayuntamiento "que se tome en serio el reto de la movilidad y el uso intensivo del espacio público, para reducir la contaminación y dar respuesta al mismo tiempo a las necesidades de desplazamientos de la ciudadanía". "Es imprescindible avanzar hacia una Santa Pola más limpia, sostenible, amable y segura".
Para la portavoz de Compromís per Santa Pola, Anna Antón, “Santa Pola necesita planificar y regular su movilidad para priorizar los desplazamientos a pie, en bicicleta o en sistemas de transporte personal como los patinetes. Todos los municipios de nuestro entorno están trabajando en una transformación urbana que reduzca la contaminación y haga de los pueblos y ciudades lugares más amables y seguros en los que vivir. No podemos quedarnos atrás”.
