Dos ejemplares de tortuga boba han sido liberadas en aguas de la reserva marina de la isla de Tabarca, después de haber sido curadas, durante unos meses, de diferentes heridas en el Acuario municipal de Santa Pola. A este simbólico acto, que se celebró el pasado viernes, 24 de julio, asistió la concejal de Cultura, Feli Bailador, y el concejal de Medio Ambiente, Daniel Carrillo.
Las tortugas bobas, que fueron capturadas accidentalmente por las redes de barcos pesqueros, han sido marcadas con anillas oficiales por el Instituto Cavanilles de la Universidad de Valencia, y con chips identificativos por parte de la Conselleria de Territori i Habitatge.