Parece que las cosas en principio no están saliendo bien para el ciclista Antonio Baile, pues la semana anterior en Pinedo, una infección cutánea y su tratamiento hicieron mella en las aspiraciones del deportista santapolero. Antonio rodó hasta el límite de sus posibilidades físicas y tuvo que abandonar a mitad de la carrera por no encontrarse en plenitud de forma y con incomodidades. El circuito de Pinedo era llano de 17,5 kilómetros, al que se daban 5 vueltas para completar 85 kilómetros totales. La carrera discurrió rápida, llegando a alcanzar los 45 kilómetros por hora de promedio final. La mala fortuna sorprendió al equipo ilicitano del ESETEC en que milita Antonio, pues en el inicio de la tercera vuelta, el hombre más rápido del equipo y que marchaba clasificado en metas volantes pinchó, debiendo parte del equipo de esforzarse en volver a introducirlo en el pelotón para no perder su clasificación. Baile al límite de sus posibilidades y antes de abandonar, realizó varios relevos para enlazar al compañero, que junto a los realizados por el resto del equipo, aunque no llegaron a fructificar, al menos consiguieron que éste último no entrase en meta fuera de control. Quedó demostrado una vez mas el excelente nivel competitivo del campeonato, tanto de los equipos participantes como de los ciclistas. Mañana la competición se traslada a Pedreguer (Alicante), con un circuito rompe piernas que se adapta más a las cualidades del ciclista local, que de estar recuperado de su afección seguramente logre un buen resultado final.