En concreto, seis voluntarios de Protección Civil mandaban una carta abierta a los medios de comunicación para dar cuenta de una serie de quejas y, sobre todo, trasladar su malestar por lo que consideran falta de respaldo por parte del Ayuntamiento de Santa Pola. Así, aseguraban que “parece ser que no le interesan nuestros servicios”, además de producirse drásticos recortes en su dotación de medios y material.
Del mismo modo, aseguran que no se les tiene en cuenta de cara a las emergencias, pues “el caso más claro de esto lo tuvimos con el derrumbe del colegio, del cual nos enteramos por fuentes ajenas al Ayuntamiento”. Inciden también en el hecho de que el concejal encargado, Antonio Pérez Huerta, “humilló y despreció tanto a la agrupación como a nosotros como personas dirigiéndonos frases como ‘estoy harto de Protección Civil’, ‘sois voluntarios, el que quiera, bien, y el que no, ya sabe’ o ‘me da igual tres que ninguno’”. En otro escrito, fechado el 4 de abril y remitido al jefe de la agrupación (éste firmado por doce voluntarios) declaran que el material que reciben es obsoleto “desecho de otros departamentos” y afirmaban que, “después de diez horas de servicio en la Media Maratón se nos mandó a casa sin comer y sin beber”.
Imprescindibles
Por otro lado, la Concejalía de Seguridad Ciudadana quiere expresar su reconocimiento a los voluntarios de la Agrupación Local de Protección Civil y manifestar que “desde el Ayuntamiento de Santa Pola siempre les hemos apoyado, les apoyamos y les apoyaremos en el futuro porque consideramos muy importante su labor”.
Afirman que no es cierto que los miembros hayan sido ignorados en las pocas emergencias que, “por fortuna, tenemos en nuestro municipio”. En cuanto a las labores que deben realizar los voluntarios, “existe un protocolo de actuación y están a disposición de la Policía Local, que es quien designa en cada momento las tareas a llevar a cabo. Cada institución tiene su propio rol y todos y cada uno de ellos son igual de dignos e importantes”.
Insisten además en que se mejorará sus infraestructuras y medios de trabajo, en la medida de los posible, “porque consideramos que su función es imprescindible”.