Cada día va menos gente, nadie te apoya en nada, los gastos son muy superiores a los ingresos, desde que abrimos nunca hemos tenido una cuenta de resultados positiva, pero este año la escalada de pérdidas es mayor y han bajado un 25 por ciento los espectadores respecto al año anterior”, señala el gerente de los cines Axión, Íñigo Astondoa. Ante esta difícil situación, Astondoa dice que ha decidido cerrar los cines en septiembre “si el verano no lo impide”. Así, desde el año 2007 el número de espectadores, que nunca ha sido mucho, ha ido bajando paulatinamente, pero en este 2011 lo ha hecho aún más, con 6.833 entradas menos vendidas que durante el mismo período del año pasado.
Para poder seguir proyectando películas en los únicos cines que hay en Santa Pola, Astondoa pide una mayor implicación por parte de la Administración Local y también del Centro Comercial. “Hace dos años mantuvimos una reunión con los representantes de la empresa propietaria del Centro Comercial, con Gavair y con asesores de Comercio del Ayuntamiento y dijeron que iban a estudiar el tema para ver qué soluciones se podían presentar, ha pasado el tiempo y no hemos recibido ninguna respuesta”, indica el gerente de los Axión.
Así, desde que abrió sus puertas en junio de 2007, han cerrado todos los negocios que había instalados salvo los propios cines y otro de juegos infantiles. Recuerda Astondoa que cuando abrió el centro había varias zapaterías y ópticas, una joyería, cafeterías, una tienda de electrodomésticos, pero todos han acabado por desistir ya que “el Centro Comercial nunca ha tenido mano izquierda, jamás ha hecho ninguna concesión”.
En el caso de los cines, “tenemos las mismas condiciones que cuando abrimos, incluso diría que peores, ya que ahora los vigilantes de seguridad tienen más funciones, como la de cuidar el parking, y nosotros pagamos nuestra parte proporcional”.
Negocios de hostelería ahora mismo sólo quedan dos: la cafetería de la entrada, de la que se han hecho cargo unos chinos y el Mar de Cristal, propiedad también de la familia Astondoa, que decidió abrir el local para que los espectadores del cine tuvieran, al menos, un sitio donde tomar algo. Y en cuanto a comercios hay un “chino” que prácticamente tiene ocupada toda la planta baja del centro y una tienda de calzado en la que tienen intereses los propietarios del centro comercial.
Mercadona está en el Polamax, pero de una manera “independiente”, ya que tiene su propio acceso en el exterior y no pagan ninguna cuota en concepto de seguridad ni de parking.
“No hay ilusión por parte de la gerencia del Centro Comercial porque funcione”, sentencia Astondoa. Y si el número de espectadores no aumenta de manera considerable, tras el verano, “trasladaremos los cines a otra localidad ya que no ves ni a la Administración Local ni a la propiedad del Centro Comercial con ganas de echarte una mano”.
En 2007 la inversión en los cines Axión fue superior a los 3 millones de euros, pero posteriormente se han realizado otras mejoras, como la tecnología digital (con mayor calidad de imagen y sonido) en tres salas o la posibilidad de proyectar películas en 3D.